Ven...
Necesito que susurres a mi oído tus pensamientos. No te los
quedes, no los dejes ahí dentro. No seas egoísta, no cargues tu solo con ese
peso. Tu voz ilumina mi firmamento. Ya basta de caminar por vidrios rotos.
Dame tu mano.
Bebe de mi copa. Sálvate y sálvame en tu poesía. Tal vez, tú
podrías ser Héctor y yo Aquiles. Iguales en combate, pero distintos en
pensamiento. Me saca de quicio que seas así, pero es lo que más me gusta de ti.
Eres asombroso, ¿sabías eso? Eres un maldito poeta y mereces
toda la gloria y el néctar de la vida. No, no eres un dios, pero captas la
belleza de donde pocos la logran ver.
Del corazón...
Sigue así, viendo rosas donde hay espinas. Nadie mejor que
tú para darle filosofía a las colillas de mis cigarrillos.
Se podría decir que estoy enamorado de ti. Es una
posibilidad, pero me conformo con ser tu simple amigo, poeta. Haces que mi
corazón colapse de emoción. Pero amo tus proezas de literatura. Esto me lleva a
preguntarte...
¿Cómo tú que escribes con semejantes dones no tiene mujer?...
¿No las quieres o no las necesitas?...
¿O... eres un romántico de corazón partido? La verdad, eso
no me extrañaría. Dicen que los mejores artistas tienen el corazón roto. Si ese
es el caso, sírvete otra copa, necesito escuchar tu historia. Necesito saber quién
es la dueña tus pensamientos.
Cuéntame todo...
[...]
Y así fue. Durante una noche supe todo lo que hace tiempo ocurrió
contigo. Así fue que decidí ser tu amigo. Para compartir tu dolor porque más
que un amante necesitabas un amigo. Es difícil ver que hay tanta gente maravillosa en
este mundo, que es lastimada constantemente por gente no tan maravillosa.
Por gente como yo...
Tal vez tú seas mi boleto al cielo. Tal vez, mi supuesto
karma sea levantarte. Pero...
¿Seguiras escribiendo así?
Yo creo que mejor. Que el día menos esperado serás
reconocido donde quiera que estés. Tu historia podría ser secreta, pero la sé
yo y con eso es suficiente.
Por favor, no te vayas porque después de esta copa vendrá otra. Necesito que sigas
hablando de esa manera tan hipnótica de como ves el mundo.
En tu boca y en tus manos tienes un arma peligrosa. Harías
caer a cualquiera a tus pies, derretirías hasta el corazón más frío por muy
helado que este...
Tienes un arma muy afilada...
Me pregunto...
¿Desnudas con la mirada también?
"Para escribir de amor, tienes que estar enamorado o con el corazón roto, y no sé cuál de las dos es peor" Charles Bukowski.
La raiza, 6 de abril de 2020.
Apolo98
"razones para quererte"